No hay muchos comics que representen el género del steampunk, si recientemente hablabamos de Stickleback ahora le toca el turno a Robotika de la que Archaia Press anunció hace un tiempo que prepara una segunda miniserie y no es de extrañar puesto que junto con Mouse Guard y Artesia es una de sus mejores licencias, por el momento, ya que tendrá un 2007 repleto de títulos. Robotika no solo es steampunk, más abstracta pero más cercana a la realidad es la descripción de Archaia como el primer western samurai-sushi-ciencia-ficción-steampunk a lo que se podría añadir cyberpunk o incluso fantasía, es una combinación de géneros conocidos para dar lugar a algo nuevo. Archaia Press casualmente hoy ha renovado su página web y ha confirmado el título de la nueva miniserie Robotika: For a Few Rubles More.
La historia de Robotika gira en un principio en torno a la creación biológica por parte de un científico de una máquina que puede reproducirse, Niko tendrá que recuperarla en un tiempo límite y Cherokee Geisha le ayudará en su tarea para satisfacer a la reina que le realiza el encargo. Después de esa misión y de descubrir el motivo de que le envien abandona las armas y se dedica a conducir a un grupo de peregrinos por lo que también es en cierto modo la historia de un vaquero que cuelga sus revolveres a los que renuncia pero debe de volver a cogerlos.
Sin embargo hay que matizar que los cuatro números que conforman la miniserie cuentan las dos historias citadas, dos números para cada una, pero que están conectadas entre sí a través de Niko y su experiencia vital. Robotika es una miniserie que fue evolucionando con cadencia más o menos bimensual pero que cobra su mayor fuerza cuando se junta toda la historia en forma de novela gráfica.
El protagonista Niko, un silencioso ronin cybernético, ha sido educado en una realidad virtual que recreaba el Japón feudal y ha aprendido a vivir como un samurai hasta que cree que es uno al servicio de su reina, pero desarrolló una voluntad propia que le hace abandonarla. También hay otros personajes importantes como el pistolero Bronski o la cyborg femenina Cherokee Geisha.
Robotika © Alex Sheikman, Archaia Press
El mundo de Robotika está sembrado de generaciones de cyborgs que se fueron quedando obsoletos ya que el futuro ha caminado hacia una sociedad en que se combina el hombre y la máquina lo que ha derivado en toda clase de esperimentos con el cuerpo humano y la tecnología, practicamente todos los personajes son androides o cyborgs y las secuencias de lucha se suceden en este comic ya que tiene acción en muy elevadas dosis. Aunque es una historia con presencia importante de la tecnología a diferencia de Masamune Shirow, Sheikman dedica poco tiempo a estos detalles y deja que los monstruos y seres que pueblan el mundo de Robotika sorprendan durante la aventura. Es un comic extraño, se le ha comparado con ciento y un obras de ciencia ficción desde Blade Runner hasta las novelas de China Mieville por su mezcla biotecnológica donde Sheikman aporta interesantes ideas por cierto.
Como decíamos no solo es steampunk, también cyberpunk y una historia de samurais con una extraña estética pero sugerente por su combinación de ciencia ficción y japón muy elegante y de fino diseño. Las criaturas de Sheikman son amalgamas de biología y tecnología que dan lugar a extrañezas, cyborgs, demonios y demás curiosidades, e incluso llegan a parecer criaturas fantásticas. Sheikman busca salirse de lo habitual en su obra e incluso ensayó una escritura vertical en lugar de horizontal para Cherokee Geisha, para otorgarle personalidad, de todas formas el comic está plagado de ideas extrañas y sorprendentes no solo a nivel de narrativa.
Robotika © Alex Sheikman, Archaia Press
Sheikman destaca como un excelente dibujante, sabe aplicar el negro y reflejar emociones y expresiones en los rostros de los personajes algo imprescindible para un personaje de pocas palabras como es el protagonista. La calidad de su trabajo es netamente apreciable en sus páginas entintadas todavía en blanco y negro, podeis observarlas en su longevo blog. Y esta es su página web donde realmente podeis disfrutar explorando la faceta artística de este completo autor.
El dibujo es limpio y bello, y Sheikman tiene talento e inteligencia. El color de Joel Chua como podeis apreciar también es importante con un color claro combinado con otros tonos vivos habilmente. Aunque Sheikman se formó en la antigua URSS y era diseñador de videojuegos ahora vive en California y Robotika ha sido elogiado por un gran elenco de autores sobre todo por la inspiración, imaginación que destila y la capacidad de sorprender, y por que no se trata de uno de esos comics a sueldo del maistream para hacer una historia de un personaje, sino que deja fluir la creatividad del autor sin ninguna atadura. Ron Marz lo ha comparado como una combinación de Tony Harris y Mike Mignola.
Sheikman también afirma que le interesa la narrativa, y que va archivando técnicas hasta que aparezca la ocasión apropiada para utilizarlas, también artistas con los que habla y experimentan continuamente con ella le empujan a seguir estudiando este aspecto, artistas como J.H. Williams III (al que se parece un poco), Ryan Shock, Norman Felchle, Brian Apthorp, y Frank Cirocco, y por supuesto hay otros grandes nombres que le motivan para desafiarse a si mismo, como Mignola, Eisner, Alex Toth, Sergio Toppi, etc.
Robotika © Alex Sheikman, Archaia Press
El tomo recopilatorio en tapa dura también tiene dos historias que están orientadas a dar más profundidad a los personajes secundarios Cherokee Geisha y Bronski escritas por Sheikman pero dibujadas por el interesantísimo Leif Jones y la segunda por Travis Sengaus que no desmerecen. Junto con unas cuantas ilustraciones del propio Sheikman hasta completar las 128 páginas.
Y para la nueva historia, Robotika: For a Few Rubles More, Sheikman dice que se está esforzando en las escenas de peleas con mucha gente a las cuales no está habituado ya que le gusta centrarse en parte de una escena, de modo que está prestando atención a crear distintos planos y aumentar la interacción entre los combatientes de dichas secuencias. También ha pedido consejo a un instructor de jiu-jitsu que comenta le está ayudando a introducir ideas originales en los combates, de forma que las luchas ya no se limitan a dos contendientes sino que implican elementos del escenario como puede ser el fuego o el agua, y también está afrontando largas secuencias más allá de unas pocas viñetas como una escena de una lucha durante todo un número que se va combinando con la narración de la historia.
Robotika © Alex Sheikman, Archaia Press
Teneis decenas de páginas para ver de Robotika en la página oficial de Archaia Press:
Páginas de Robotika
La historia de Robotika gira en un principio en torno a la creación biológica por parte de un científico de una máquina que puede reproducirse, Niko tendrá que recuperarla en un tiempo límite y Cherokee Geisha le ayudará en su tarea para satisfacer a la reina que le realiza el encargo. Después de esa misión y de descubrir el motivo de que le envien abandona las armas y se dedica a conducir a un grupo de peregrinos por lo que también es en cierto modo la historia de un vaquero que cuelga sus revolveres a los que renuncia pero debe de volver a cogerlos.
Sin embargo hay que matizar que los cuatro números que conforman la miniserie cuentan las dos historias citadas, dos números para cada una, pero que están conectadas entre sí a través de Niko y su experiencia vital. Robotika es una miniserie que fue evolucionando con cadencia más o menos bimensual pero que cobra su mayor fuerza cuando se junta toda la historia en forma de novela gráfica.
El protagonista Niko, un silencioso ronin cybernético, ha sido educado en una realidad virtual que recreaba el Japón feudal y ha aprendido a vivir como un samurai hasta que cree que es uno al servicio de su reina, pero desarrolló una voluntad propia que le hace abandonarla. También hay otros personajes importantes como el pistolero Bronski o la cyborg femenina Cherokee Geisha.
El mundo de Robotika está sembrado de generaciones de cyborgs que se fueron quedando obsoletos ya que el futuro ha caminado hacia una sociedad en que se combina el hombre y la máquina lo que ha derivado en toda clase de esperimentos con el cuerpo humano y la tecnología, practicamente todos los personajes son androides o cyborgs y las secuencias de lucha se suceden en este comic ya que tiene acción en muy elevadas dosis. Aunque es una historia con presencia importante de la tecnología a diferencia de Masamune Shirow, Sheikman dedica poco tiempo a estos detalles y deja que los monstruos y seres que pueblan el mundo de Robotika sorprendan durante la aventura. Es un comic extraño, se le ha comparado con ciento y un obras de ciencia ficción desde Blade Runner hasta las novelas de China Mieville por su mezcla biotecnológica donde Sheikman aporta interesantes ideas por cierto.
Como decíamos no solo es steampunk, también cyberpunk y una historia de samurais con una extraña estética pero sugerente por su combinación de ciencia ficción y japón muy elegante y de fino diseño. Las criaturas de Sheikman son amalgamas de biología y tecnología que dan lugar a extrañezas, cyborgs, demonios y demás curiosidades, e incluso llegan a parecer criaturas fantásticas. Sheikman busca salirse de lo habitual en su obra e incluso ensayó una escritura vertical en lugar de horizontal para Cherokee Geisha, para otorgarle personalidad, de todas formas el comic está plagado de ideas extrañas y sorprendentes no solo a nivel de narrativa.
Sheikman destaca como un excelente dibujante, sabe aplicar el negro y reflejar emociones y expresiones en los rostros de los personajes algo imprescindible para un personaje de pocas palabras como es el protagonista. La calidad de su trabajo es netamente apreciable en sus páginas entintadas todavía en blanco y negro, podeis observarlas en su longevo blog. Y esta es su página web donde realmente podeis disfrutar explorando la faceta artística de este completo autor.
El dibujo es limpio y bello, y Sheikman tiene talento e inteligencia. El color de Joel Chua como podeis apreciar también es importante con un color claro combinado con otros tonos vivos habilmente. Aunque Sheikman se formó en la antigua URSS y era diseñador de videojuegos ahora vive en California y Robotika ha sido elogiado por un gran elenco de autores sobre todo por la inspiración, imaginación que destila y la capacidad de sorprender, y por que no se trata de uno de esos comics a sueldo del maistream para hacer una historia de un personaje, sino que deja fluir la creatividad del autor sin ninguna atadura. Ron Marz lo ha comparado como una combinación de Tony Harris y Mike Mignola.
Sheikman también afirma que le interesa la narrativa, y que va archivando técnicas hasta que aparezca la ocasión apropiada para utilizarlas, también artistas con los que habla y experimentan continuamente con ella le empujan a seguir estudiando este aspecto, artistas como J.H. Williams III (al que se parece un poco), Ryan Shock, Norman Felchle, Brian Apthorp, y Frank Cirocco, y por supuesto hay otros grandes nombres que le motivan para desafiarse a si mismo, como Mignola, Eisner, Alex Toth, Sergio Toppi, etc.
El tomo recopilatorio en tapa dura también tiene dos historias que están orientadas a dar más profundidad a los personajes secundarios Cherokee Geisha y Bronski escritas por Sheikman pero dibujadas por el interesantísimo Leif Jones y la segunda por Travis Sengaus que no desmerecen. Junto con unas cuantas ilustraciones del propio Sheikman hasta completar las 128 páginas.
Y para la nueva historia, Robotika: For a Few Rubles More, Sheikman dice que se está esforzando en las escenas de peleas con mucha gente a las cuales no está habituado ya que le gusta centrarse en parte de una escena, de modo que está prestando atención a crear distintos planos y aumentar la interacción entre los combatientes de dichas secuencias. También ha pedido consejo a un instructor de jiu-jitsu que comenta le está ayudando a introducir ideas originales en los combates, de forma que las luchas ya no se limitan a dos contendientes sino que implican elementos del escenario como puede ser el fuego o el agua, y también está afrontando largas secuencias más allá de unas pocas viñetas como una escena de una lucha durante todo un número que se va combinando con la narración de la historia.
Teneis decenas de páginas para ver de Robotika en la página oficial de Archaia Press:
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